martes, 16 de febrero de 2016

Mr. Brooks, un tipo común.....

El señor Brooks es el hombre del año, tiene una hermosa esposa, una hija en la universidad y su compañía marcha perfecto, sin embargo a pesar de todo ello guarda un oscuro secreto: tiene una tendencia patológica a asesinar, con la ayuda de su alter ego al que llama Marshall 



Una película del 2007 que tiene una carga de intriga, psicología e incluso un mensaje profundo que nos puede llegar a asustar el hecho de sentirnos identificados con el señor Brooks a la vez que asqueados con su accionar.
Por un lado te identificas con ese personaje luchador que saca a su familia adelante, quien ademas ama a su hija y esposa dando todo de si por ellas, que tiene una compañía que funciona de maravilla e incluso esta expandiéndose, hasta aquí todo idílico, el sueño americano en toda su expresión, los sueños de alguien que quiere trascender; pero lo que esta en la superficie no es todo lo que hay.

Aquí es cuando aparece esa voz interna que todos llevamos dentro, pero que en este caso el señor Brooks lo representa como Marshall, quien lo aconseja??? a retomar su hobby, uno muy macabro el del asesinato, a sangre fría y con escenas calculadas a la perfección para no ser atrapados, perturbador sin duda, este punto es donde todo se tuerce y vez a ese carismático padre de familia tomando vidas por diversión y satisfacción, y sobre todo no ser atrapado. Sin embargo no todo esta perdido a así parece, hay una detective que le ha estado siguiendo los pasos desde tiempo atrás, aunque esta detective esta en medio de un divorcio millonario (donde ella es quien tiene los millones), esto parece un dato insulso que después se vuelve relevante; también cuan el señor Brooks realizo un asesinato cometió un error y fue visto por un fisgón que incluso le toma fotografías y las usa para extorsionarlo no de una manera monetaria sino mas bien perversa queriendo formar parte de las matanzas.

Todo da un giro cuando la hija de Mr. Brooks vuelve de la universidad pero con un secreto oculto, el cual este p tarda en descubrir y es que su hija sufre el mismo mal que el son asesinos patológicos, después de un par de artimañas para hacer que su hija salga libre de una investigación corrobora su duda y la cual es un temor a la vez.
Después el final es un tobogán de situaciones perfectamente calculadas puesto que de un solo movimiento maestro logra inculpar a su acosador, dejar mal parada a la detective y quedar impune; pero con sus miedos rondando por su cabeza.






BTC